Me imagino que entendereis perfectamente cual fue ayer mi cabreo al llegar del trabajo en encondtrarme la calle en la que se encuentra el garaje donde duerme mi moto tomada por un grupo de ultraderechistas xenófobos que hacían apología del nacismo, para más "inri" la manifestación en cuestión estaba permitida y protegida por el Ayuntamiento, así que tuve que dar un enorme rodeo para poder dejar la moto en la puerta de mi casa hasta que ese grupo de fanáticos abandonasen su "acto" y la policía muncipal dejase abierta la calle. Esto me hace pensar en si me darían permiso a otros cuatro colegas y a mí para armar jaelo en la plaza del pueblo o cortar una carretera pidiendo el cambio de color del cielo o cualquier otra estupides.
Por cierto, no eran nacis, era una procesión por una estatuilla de madera que representaba a una vírgen (¡como para creérselo!), pero supuse que sería más fácil de entender mi cabreo si empezaba de otra manera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario